Las tragedias (obras de teatro) eran presentadas en honor del Dios Dionysio. En Atenas se desarrollaban cuatro festivales anuales, en honor del Dios: la "Pequeña Dionysia" a fines de lo hoy conocemos como diciembre, La Lenea en enero, La Antestheria en febrero y la Gran Dionysia, en marzo. Sin embargo los festivales de concurso sólo se desarrollaban durante Lenea y la Gran Dionysia. Durante la pequeña Dionysia se presentaban obras antiguas, mientras en las demás sólo se representaban nuevas obras. En especial durante la Gran Dionysia, la mayor representación teatral que duraba seis grandiosos días. El primer día era para la Parada Sagrada, en donde extranjeros eran aceptados como participantes. Los próximos dos días era para concurso de danzas. Durante los otros tres días se presentaban las concursos de tragedias.
En este concurso participaban sólo tres poetas. El Honorable Arcon, especie de gobernador de Atenas, era el único juez para la elección de los tres poetas finalistas. Los poetas interesados debían someter sus trabajos a su consideración, compuesto por tres tragedias y un drama satírico, todos los cuales eran representados en una sesión. El poeta y los hypocrits eran pagados por el Estado, mientras el resto de los participantes eran pagados por los patrocinantes. Estos patrocinantes eran individuos muy respetados entre la sociedad ateniense. Pocos días antes del concurso se nominaba a los jueces, formado por 500 atenienses, sus nombres eran escritos en una pequeñas esferas y depositados en una urna en el Partenón.
La presentación se inciaba con la alborada, cada día participaba un poeta con su tetralogía. Los asistentes no pagaban nada, de manera que se permitía la entrada a todos los interesados, el pago del Estado aseguraba su entrada. Al final de las presentaciones 10 jueces eran electos como jurado final del concurso, cinco de los cuales eran elegidos, por lotería, para decidir. El Estado mantenía el record de los ganadores en pizarras de mármol, con el nombre de los poetas, patrocinadores y los actores.
La presentación de la tragedia se iniciaba con la entrada del coro con la orquesta cantando una oda, que recibía en nombre de parodos. Los coros siempre estaban cantando entre los diálogos de la obra, cantos llamados Estasimas, en ensambles o en dos grupos o Hemechorias. Además de los cantos de los coros habían otras partes cantadas a cargo de un actor o monodia o entre dos actores o diodia. Parodos, estasimas, monodios y diodios constituían la parte lírica de la obra.
La prosa empezaba con los prólogos y continuaba desarrollándose a través de episodios y terminaba con el epílogo o exodus. Las tragedias (obras de teatro) eran presentadas en honor del Dios Dionysio. En Atenas se desarrollaban cuatro festivales anuales, en honor del Dios: la "Pequeña Dionysia" a fines de lo hoy conocemos como diciembre, La Lenea en enero, la Antestheria en febrero y la Gran Dionysia, en marzo.
Sin embargo los festivales de concurso sólo se desarrollaban durante Lenea y la Gran Dionysia. Durante la pequeña Dionysia se presentaban obras antiguas, mientras en las demás sólo se representaban nuevas obras. En especial durante la Gran Dionysia, la mayor representación teatral que duraba seis grandiosos días. El primer día era para la Parada Sagrada, en donde extranjeros eran aceptados como participantes. Los próximos dos días era para concurso de danzas. Durante los otros tres días se presentaban las concursos de tragedias.
En este concurso participaban sólo tres poetas.
El Honorable Arcon, especie de gobernador de Atenas, era el único juez para la elección de los tres poetas finalistas. Los poetas interesados debían someter sus trabajos a su consideración, compuesto por tres tragedias y un drama satírico, todos los cuales eran representados en una sesión. El poeta y los hypocrits eran pagados por el Estado, mientras el resto de los participantes eran pagados por los patrocinantes. Estos patrocinantes eran individuos muy respetados entre la sociedad ateniense.
Pocos días antes del concurso se nominaba a los jueces, formado por 500 atenienses, sus nombres eran escritos en una pequeñas esferas y depositados en una urna en el Partenón.
La presentación se inciaba con la alborada, cada día participaba un poeta con su tetralogía. Los asistentes no pagaban nada, de manera que se permitía la entrada a todos los interesados, el pago del Estado aseguraba su entrada.
Al final de las presentaciones 10 jueces eran electos como jurado final del concurso, cinco de los cuales eran elegidos, por lotería, para decidir. El Estado mantenía el record de los ganadores en
Los poetas también escribían la música de las obras; los cantos eran llevados por la orquesta compuesta de flautas, tambores y cítaras.
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